La Taberna del Buho

¡Hola, amantes de la buena comida! Si aún no conocéis La Taberna del Búho, tenéis que añadirla a vuestra lista. Este acogedor restaurante, ubicado en Calle Mayor 61, 28515 Olmeda de las Fuentes, es el lugar perfecto para disfrutar de una experiencia gastronómica única en un pintoresco pueblito de Madrid que la mayoría de los madrileños aún no ha descubierto. Con su ambiente cálido y una bonita terraza, es ideal para esas tardes soleadas o para una cena relajada con amigos.

La carta es un verdadero festín, con 14 platos que van desde opciones internacionales hasta delicias mediterráneas. Si eres amante de los mariscos, ¡estás de suerte! Aquí encontrarás sabrosas opciones que te harán querer volver una y otra vez. No olvides hacer una reserva llamando al +34 918 73 65 83. Así que ya sabéis, si estáis buscando un rinconcito encantador donde disfrutar de buena comida y un ambiente acogedor, La Taberna del Búho es la opción perfecta. ¡No os lo perdáis!

Dónde se encuentra La Taberna del Búho

¡Tío, déjame contarte sobre La Taberna del Búho! La última vez que pasé por allí, esperaba algo espectacular, pero la experiencia no fue lo que pintan. Llegamos animados por las recomendaciones, decididos a probar esos famosos huevos rotos con jamón y trufa que todo el mundo menciona. Las patatas estaban congeladas y el jamón, bueno, estaba tan duro que era más fácil morder una zapatilla que disfrutar de la comida. Y para colmo, pesar de sincerarnos con el personal sobre nuestro plato casi lleno, se enojaron un poco. Definitivamente el trato no fue el mejor.

Pero, no todo es negativo, ¡hay otras experiencias que valen la pena! Un amigo nos recomendó para desayunar allí un día, ¡y eso fue otro rollo! Con unos refrescos nos trajeron unas tapitas que estaban para morirse. Las croquetas y las papas con mojo picón volaron de la mesa. Y el toque extra de los guisos para probar, judiones con chorizo y garbanzos, fue la guinda del pastel. Sin duda, el cocinero sabe lo que hace, todo rico y el ambiente, bastante agradable.

Y si hablamos de cenas, lo mejor es que también puedes encontrar un ambiente más familiar. Un colega nos llevó a cenar y nos acomodaron sin reserva. Nos pusieron una ensalada fresca de aguacate que estaba de lujo y esos rejos… madre mía, una delicia. Al final, acabamos compartiendo una tarta de queso y un brownie que nos dejaron con ganas de más.

Así que, si te estás preguntando ¿Dónde se encuentra La Taberna del Búho?, está en C. Mayor, 61, 28515 Olmeda de las Fuentes, Madrid. Ideal para un día de relax o para un buen desayuno después de dar una vuelta. Pero ya te aviso, ¡mejor ir con la mente abierta porque a veces el servicio no es el mejor!

Cuál es la dirección exacta del restaurante

Y, bueno, no todo ha sido una experiencia positiva en La Taberna del Búho. Recuerdo una vez que fuimos a dar una vuelta por el pueblo y solo queríamos tomar algo de vermú. Preguntamos si había hueco y la camarera, con un tono bastante desagradable, nos dijo que estaba casi todo reservado. Cuando le comenté que solo íbamos a sentarnos a tomar algo y no a comer, me soltó: "Eso dicen muchos y luego se quedan." En fin, ¡un encanto! Así que decidimos levantarnos y buscar otro lugar. Una pena, porque el sitio tiene muy buena pinta, pero con ese tipo de actitud, la verdad es que no me apetece volver a intentarlo. Valoración de servicio: 1 estrella.

Por otro lado, tengo que contarte sobre una experiencia completamente diferente que tuvimos con un grupo de amigos allí. Fue un auténtico acierto. Comimos como reyes y, de verdad, ¡salimos encantados! La comida estaba deliciosa y, lo mejor de todo, la atención fue fantástica. Esas camareras deben de tener un don, porque estaban en todo momento pendientes de nosotros pero sin hacernos sentir agobiados. Hasta nos sorprendieron con unos polvorones de postre y, cuando pedimos copas, nos trajeron gominolas de cortesía. Además, nos dejaron un chupito de la casa en la mesa y nos permitieron servirnos como quisiéramos. Valoración: 5 estrellas para servicio, ambiente y comida.

Hemos ido varias veces y cada vez ha sido un descubrimiento. En una de esas ocasiones, fuimos con los niños y, desde que llegamos, nos amenizaron. Al momento, nos pusieron un aperitivo de fuets y un paté casero riquísimo. Pedimos varias cosas para compartir, como croquetas variadas, berenjena, patatas mojo y un guiso de jabalí increíble. Nada que decir de los postres caseros, ¡todo un acierto! Mario, el dueño, fue super atento y cordial tanto con nosotros como con los peques, y la camarera fue genial. Sin duda, estas experiencias han hecho que repitamos y lo recomendemos a todos. Valoración: 5 estrellas una vez más.

Y si te preguntas cuál es la dirección exacta de La Taberna del Búho, es C. Mayor, 61, 28515 Olmeda de las Fuentes, Madrid. ¡No te arrepentirás de visitarlo!

Qué tipo de comida se ofrece en La Taberna del Búho

Y cómo olvidar la experiencia en La Taberna del Búho, ¿verdad? La última vez que fuimos, decidimos sentarnos en la terraza y, la verdad, no nos arrepentimos. El ambiente se siente muy acogedor, y la vista le da un toque especial a la comida. Empezamos con unas berenjenas que estaban de rechupete, y los espárragos trigueros fueron la explosión de sabor que necesitábamos. Pero el plato estrella, sin duda, fue el guiso de judiones con ciervo y boletus. Un auténtico manjar que nos dejó más que satisfechos. ¡Y ni hablar del postre! La tarta de queso fue la guinda del pastel.

Aparte, el servicio fue simplemente excepcional. Nos invitaron a un chupito al finalizar la comida, lo que siempre es un buen detalle que sumó a la experiencia. La amabilidad del personal es algo que resalta, te hacen sentir como en casa desde el momento en que entras. Por cierto, hay opciones vegetarianas también, lo que lo hace ideal para ir con amigos que tienen diferentes preferencias alimenticias. Aunque sería buena idea que actualizaran un poco sus tarifas y la carta en la web, porque siempre es útil saber con qué te vas a encontrar.

En general, a pesar de que la comida divida opiniones, lo que está claro es que la experiencia es positiva. La Taberna del Búho es un lugar para disfrutar de una buena comida y compañía. La fritura es bien ejecutada, las croquetas son caseras y destacan junto a otros platos como la parrillada. En nuestro caso, comimos entre cuatro personas y, aunque pedimos bastante, en algún momento nos dimos cuenta de que compartir platos siempre es una buena idea, ¡son abundantes!

Entonces, ¿qué tipo de comida se ofrece en La Taberna del Búho? Pues, ¡una mezcla deliciosa! Desde ricas tapas como las papas con mojo picón hasta elaboraciones más contundentes como el cachopo o sus clásicos guisos con ingredientes frescos. Se nota que tienen un cuidado especial por la calidad de los productos que utilizan. Sin duda, un sitio que merece la pena descubrir y redescubrir.

Cuántos platos hay en la carta del restaurante

Y bueno, no puedo dejar de hablar de La Taberna del Búho. La verdad es que es un sitio de 10. Fuimos un viernes por la noche, y ni siquiera teníamos reserva, pero el personal hizo todo lo posible por darnos mesa. Nos colocaron en un rinconcito muy acogedor, donde la ambiente era perfecto para una cena con amigos. La camarera que nos atendió fue super amable y atenta, algo que realmente se agradece. Además, el cocinero (ese gran tío que se llama Mario) se acercó a saludarnos y nos dio algunas recomendaciones. Eso siempre hace que te sientas bienvenido, ¿no crees?

Hicimos un buen pedido para picar: papas con mojo, berenjena con miel, croquetas variadas y, claro, ¡morciiiita de Burgos! Todo estaba buenísimo. Cuando llegó el momento del postre, estábamos reventados, así que decidimos pedirlo para llevar. Pero, en cuanto llegamos a casa, no pudimos resistirnos a hincarle el diente a la tarta de zanahoria y al brownie. Spoiler: ¡los dos eran BUENÍSIMOS! Si os soy sincero, la tarta fue una revelación; nunca había probado una tan jugosa y deliciosa.

Y cuando hablo de la comida, no puedo dejar de mencionar los huevos con trufa y carabineros. Menuda joya, ¡os lo recomiendo 100%! También probamos el chuletón y el cachopo con Emmental, porque es que no hay manera de resistirse a esos platos. Las porciones son super generosas, así que es fácil comer de más, pero vale la pena cada bocado. La atención fue exquisita, incluso con nuestros dos peques, a quienes los atendieron con mucho cariño. Si llevas a tu perrito, no te preocupes; tienen un cuenco con agua para ellos, y no pusieron ningún problema en montarnos una mesa en la terraza.

Respecto a la carta del restaurante, hay un montón de opciones, pero está claro que los platos que más destacan son las papas con mojo picón, las croquetas caseras y, no puedo decirlo suficiente, la tarta de zanahoria. Así que, si decides visitar La Taberna del Búho, ¡prepárate para disfrutar de una experiencia culinaria espectacular!

La Taberna del Búho ofrece opciones vegetarianas

Y bueno, si estás pensando en una escapada cerca de Madrid, La Taberna del Búho es un lugar que no puedes dejar pasar. A tan solo 30 minutos de Madrid, este encantador rincón en Olmeda de las Fuentes te sorprenderá. Además, el ambiente es de lo más acogedor. Tere y Mario, los dueños, son verdaderos encantos; siempre están atentos a lo que necesites, haciendo que te sientas como en casa. Pero ojo, si decides ir, ¡te recomiendo que hagas una reserva previa! En fines de semana, se llena muy rápido.

La comida... ¡madre mía, la comida! No puedes irte sin probar las Papas Mojo, que son simplemente espectaculares, y por supuesto, la berenjena con miel. ¡Una mezcla de sabores que merece la pena! Y si te gustan las carnes, el chuletón es algo que no puedes dejar pasar. Se habla mucho de los postres caseros, y créeme, están a la altura. Varias personas han comentado que se quedan con ganas de más, y no es para menos, porque todo está para repetir. Si llegaras a pasar un mal rato por algo, me parecería raro, ya que suelen tener una calificación de 5 estrellas en todos los aspectos: comida, servicio y ambiente.

Aunque hay relatos de personas que no pudieron comer por falta de reservas, la experiencia de aquellos que han tenido esa suerte parece ser muy positiva. Las tapas son otro de los puntos fuertes, y hay una buena variedad. Y para los amantes de la cerveza, encontrarán Estrella de Galicia de grifo, ¡perfecta para acompañar cualquier plato! Eso sí, ten en cuenta que aparcar puede ser complicado, así que ve con tiempo.

Y para los vegetarianos que se pregunten si en la Taberna del Búho hay opciones para ellos, ¡la respuesta es sí! Aunque ha habido algún comentario de que la oferta puede no ser enorme, lo importante es que hay en la carta algunos platos que podrían satisfacer esos paladares. Así que, si te animas a visitar este pequeño paraíso gastronómico, estoy segura de que no te arrepentirás. ¡Volveremos a por más sin duda!

Es necesario hacer una reserva para visitar el restaurante

Y ya que estábamos en la zona, no pudimos resistir la tentación de dar una vuelta por La Taberna del Búho en C. Mayor, 61, 28515 Olmeda de las Fuentes, Madrid. La verdad, fue una sorpresa increíble. Si te apetece comer en un lugar donde la comida casera brilla por su sabor, aquí es donde tienes que estar. Las croquetas variadas que probamos fueron un éxito total, ¡y eso que luego vinieron los mejillones y las berenjenas con miel! Cada plato que salió de la cocina parecía tener su propia historia, y eso nos encantó.

Pero, ¡espera! ¡No podemos olvidar mencionar los judiones con ciervo! Eso fue una revelación, sinceramente. Los guisos que ofrecen aquí son para quitarse el sombrero. Y después de esa comilona, nos dio la vida la tarta de crema de orujo. No te imaginas lo que es eso hasta que lo pruebes. Sencillamente exquisito. Además, el chef se acercó a nosotros para asegurarse de que todo estaba a nuestro gusto, y eso dice mucho de la atención que reciben los clientes. ¡Un 10 en atención, comida y ambiente!

Hablando del ambiente, no hace falta mencionar lo cómodo y tranquilo que es comer al aire libre en su terraza. A veces se siente como si estuvieras en un pequeño oasis, perfecto para disfrutar con amigos. Te aseguro que el servicio es de diez, siempre pendiente de lo que necesitas y dándote recomendaciones que no puedes ignorar, como las famosas Papas con Mojo Picón. ¡Es que no se pueden dejar pasar!

Ahora, con respecto a si es necesario hacer una reserva, es algo que yo consideraría. Al ser un lugar tan popular y con tan buenas reseñas, es probable que en los fines de semana o en días festivos se llene rápido. Así que, si tienes en mente ir, mejor llama y asegúrate tu mesa. ¡No querrás perderte esta experiencia porque no tenías dónde sentarte!

Cuál es el número de teléfono para hacer reservas

Si intentamos hablar de La Taberna del Búho, el panorama no pinta nada bien. ¡Vaya decepción! Llegamos al pueblo, que es todo un encanto, pero la taberna… bueno, mejor dejémoslo. Nos sentamos en la terraza con la esperanza de disfrutar de un buen cortado y un poleo, pero nos quedó claro que esos son solo para los que se quedan a comer. La camarera nos miró como si estuvieran haciendo un favor enorme si nos atendían. Al final, terminamos pidiendo dos cervezas, que al menos eso sí nos lo permitieron. Pero, te juro, si solo queríamos unos cafés, ¡habríamos buscado otro lugar!

Y lo peor de todo fue la actitud del camarero. Un día perfecto para estar al aire libre, pero resulta que se negó a dejarnos comer en la terraza porque “iba a llover”. No había nubes ni nada que lo indicara, y le dijimos que no había problema por mover las mesas si hacía falta. Ya te puedes imaginar lo tenso que se puso; parecía que le estábamos pidiendo algo imposible. En fin, para qué hablar de un ambiente tan incómodo... ¡Sin ganas de volver!

Hicimos una parada para comer allí y decidimos probar los guisos de cardo y judiones con ciervo y unas croquetas de jamón. El resultado: ¡una auténtica decepción! Claro, 15€ por un guiso que parecía una tapa, con cuatro judiones contados. Y ni rastro de la carne de ciervo. Las croquetas estaban frías y sabían a pura harina. Con cuatro personas en la mesa, el total fue de 50€. ¿En serio? No sé si era el menú del día o un timo al turista, pero no lo recomiendo para nada.

Al final, es una pena que un lugar tan bonito como Olmeda de las Fuentes se estropee con un servicio así. ¡Los motoristas ahí no son bienvenidos, por lo visto! Nos sentaron en una mesa que nadie quería y, cuando fui a pagar, me dicen que no tenían cambio para un billete de 50€. ¿Qué es eso? Al menos podrían tener un poco más de tacto con los visitantes. Nos miraban como si fuéramos de otro planeta. La tortilla de aperitivo que les sobró fue lo mejor que se les ocurrió; en resumen, un auténtico fiasco. En fin, nunca más en este sitio.

Por cierto, sé que algunos pueden estar preguntándose: “¿y si quiero reservar?”. Me temo que no tengo el número directo para La Taberna del Búho, pero considerando la experiencia, tal vez es mejor buscar otro sitio para comer. ¡Buena suerte si decides aventurarte por allí!

El restaurante tiene una terraza para comer al aire libre

Y volviendo a lo que te contaba, La Taberna del Búho tiene una especie de encanto que la hace querer visitarla, pero, vaya, que la experiencia no siempre es la mejor. La última vez que estuve, probé las raciones y, sinceramente, las croquetas eran tan escasas que parecía más un aperitivo para una persona que para compartir. Y no hablemos de las patatas, por Dios, ¡estaban carísimas y congeladas! Eso sí, la ración de berenjenas me dejó el estómago hecho un lío. Terminé esa noche en urgencias con un dolor horrible. ¿Así hay que comer en este sitio? No me quiero ni imaginar cómo tienen la cocina, a saber cómo las preparan...

Por otro lado, he escuchado de gente que ha tenido experiencias fabulosas. A veces dicen que lo mejor es ir a la terraza, que es agradable y tienen un ambiente muy chido, perfecto para relajarse. Inclusive, las cervezas son bastante buenas y la comida, cuando la aciertan, parece que quita el sentido. Un amigo me comentó que los judiones son de otro mundo y que lo que pidas tiende a ser delicioso. De hecho, Mario, uno de los camareros, es un crack: te trata como si fueras de la familia, lo cual siempre es un buen detalle.

Ahora bien, no todo es color de rosa. En una ocasión, intentamos comer fuera con un clima espectacular, apenas a 24 grados, y nos dijeron que no nos podían montar la mesa. What? Eso fue un completo desastre. Y ni se te ocurra entrar solo por un café o una Coca-Cola, porque te vas a quedar con las ganas, solo atienden comidas. Eso es algo que no se puede dejar pasar por alto... En serio, lo de La Taberna del Búho a veces es un tira y afloja.

Y en respuesta a la pregunta de si tienen terraza para comer al aire libre, sí, definitivamente tienen una. Eso sí, prepárate para las sorpresas, tanto buenas como malas, antes de sentarte ahí. Quizás, solo quizás, deberías arriesgarte un poco y probar, pero, ¡un ojo con lo que pides!

Qué tipo de ambiente se puede esperar en La Taberna del Búho

Y bueno, si hablamos de La Taberna del Búho, hay que decir que está en un pueblecito super encantador de los pintores, con una estética armoniosa que parece sacada de un cuadro. El ambiente es super acogedor, perfecto para disfrutar de una buena comida. Ya sabes, ese tipo de lugar donde te sientes a gusto charlando con amigos. Yo, por mi parte, no me pude resistir a las papas arrugás con mojo y unos espárragos a la plancha que estaban que flipas, ¡muy recomendables!

Una cosa que sirve para recordar es que, si no reservas, mejor que no te lo tomes a la ligera. He escuchado anécdotas de gente que ha ido y ha tenido que comer en la barra porque no había sitio. Aunque si tienes suerte, ¡puedes disfrutar de su terraza! Tiene un aire muy agradable, con el entorno lleno de árboles, lo que lo hace aún más especial. De verdad que el pueblo es muy bonito y está muy cuidado, perfecto para dar un paseíto después de comer.

Otra cosa de la que nadie se queja es del personal. La amabilidad se siente en el aire y eso siempre suma puntos, ¿verdad? Cuentan que el servicio es swift y atento, aunque hay algún relato de días ajetreados en los que la cocina parece pequeña para la demanda. Si te decides a ir, ten siempre un ojo en la reserva, especialmente si se acercan horas pico.

En cuanto al ambiente, imagina un lugar con un aire de relajación, donde el servicio es caluroso y el ambiente es tranquilo. La decoración cuida todos los detalles que te hacen sentir parte del encanto del pueblecito, con un local pequeño pero super acogedor por dentro. Simplificando: ¡es uno de esos sitios que invitan a volver! Así que, ya sabes, si buscas buena comida y compañía, La Taberna del Búho podría ser tu próximo destino.

Fotografías La Taberna del Buho