Mesón Licinia

¡Hey, foodie! Si estás buscando un lugar donde comer bien en Morata de Tajuña, Mesón Licinia es un must. Situado en C. del Carmen, 24, este restaurante tiene todo lo que necesitas para disfrutar de una buena comida. Abren todos los días de 11 a 17:30h para el almuerzo y, si prefieres la cena, también están disponibles de 21:00 a 23:00h. Además, puedes hacer tu reserva llamando al 91 873 03 87. Trust me, ¡no querrás quedarte sin mesa!

La experiencia gastronómica es increíble. Sus platos, elaborados por un chef talentoso, son una fiesta para el paladar. Y no te olvides de dejar espacio para el postre, porque los tienen bien ricos. También ofrecen unos vinos de la bodega Licinia que son puro lujo y que te van a dejar sorprendido por su calidad. Así que ya lo sabes, si quieres disfrutar de buena comida, este es el lugar. Puedes chequear más en su web o en Instagram. ¡A disfrutar!

Dónde se encuentra el Mesón Licinia

¡Ey, gente! Si aún no conocéis Mesón Licinia, tenéis que darle una oportunidad. Este restaurante se encuentra en C. del Carmen, 24, 28530 Morata de Tajuña, Madrid, y puedo deciros que es un lugar en el que vais a querer repetir. Lo mejor de todo es el trato excepcional que recibiréis. La amabilidad del equipo es notable, ¡y el Chef José Ramón se asegura de que cada plato salga con cariño!

Hablando de la comida, si os gustan las migas o un buen carpaccio de Angus, aquí lo preparan de maravilla. Por un precio de unos 30 a 40 euros por persona, la relación calidad-precio es muy correcta, y no os decepcionará. Además, el ambiente en la terraza es genial. Imagina disfrutar de una buena comida al aire libre con buena compañía. ¡Es un planazo!

Y ni hablar de los postres. Aunque me quedé con ganas de una tarta, el helado de chocolate y la pannacotta son una delicia que no os podéis perder. ¡Y las croquetas caseras son otro nivel! Si queréis un toque diferente, pedid esos chips de oreja que me dejaron alucinado. Son inolvidables, en serio.

Por si fuera poco, la zona tiene muchas plazas de aparcamiento y es gratuito, así que no hay excusas para no visitarlo. Así que ya sabéis, apuntad en la lista de sitios a probar: Mesón Licinia, un lugar acogedor con un menú que os hará la boca agua. ¡Nos vemos ahí!

Cuáles son los horarios de apertura del Mesón Licinia

Y ya que estamos hablando de Mesón Licinia, tengo que decirte que este lugar tiene un estilo rústico que te hace sentir como en casa, ¡pero con más encanto! La verdad es que el salón es amplio y perfecto para compartir buena comida con amigos o familia. Si optas por el menú degustación, que está a 27€ por cabeza, te aseguro que no te arrepentirás. La variedad de platos es bastante completa y está todo bien logrado, aunque debo admitir que el postre de chocolate no fue lo que más me impresionó. Pero para ser justos, los postres en general son espectaculares, especialmente la mousse de manzana. ¡Eso sí que es un cierre perfecto!

Hablando de comida, si eres de los que prefieres algo más ligero o buscas tapas, aquí tienen una carta de tapas muy original e innovadora. Aunque, atención, no esperes las típicas patatas bravas, porque lo que me encontré fueron cuatro gajos de patata que no parecían bravas en absoluto. ¡Pero oye! Todo estaba rico y cenamos tranquilamente. El servicio también fue muy amable, lo que siempre suma, ¿no crees?

Además, el lugar cuenta con un patio habilitado donde puedes comer al aire libre, ideal para los días soleados. Y para rematar, tienen bastante espacio para aparcar, lo cual siempre es un alivio. Aunque tengo que decir que el aire acondicionado no lo encienden, y si te pilla un día de calor extremo, lo puedes pasar un poco mal. Pero si logran solucionar eso, sin duda volveré, porque la comida vale la pena.

Y para que no se te olvide, el horario de apertura del Mesón Licinia es bastante cómodo: abren de lunes a domingo de 12:00 a 16:00 y de 20:00 a 23:00. Así que, no hay excusas para no darte una vuelta y disfrutar de todo lo que ofrecen. ¿A quién no le apetece una buena cena con amigos? ¡Nos vemos allí!

Es necesario hacer una reserva para comer en Mesón Licinia

Así que, después de tanto hablar sobre lugares para comer, no puedo dejar de mencionar el Mesón Licinia en Morata de Tajuña. La verdad es que es una experiencia que vale la pena. José Ramón y Ana han creado un ambiente increíble donde la comida es solo una parte de la magia. La atención es espectacular, y precisamente como nos pasó cuando visitamos, siempre hay detalles que te sorprenden, como cuando el chef se acerca a preguntarte cómo va todo. ¡Eso dice mucho del compromiso que tienen con sus clientes!

La comida también es digna de mención. Si te gustan las sorpresas gastronómicas, no te puedes perder los chips de oreja con alioli de aceituna. Son un tipo de tapa que no esperas encontrar y que, créeme, no te dejarán indiferente. Y ya que estamos, si tienes la oportunidad de probar la ensaladilla con camarones rebozados o el arroz con calamares en su tinta, entenderás por qué todos estamos hablando de lo buena que es la cocina de este lugar. ¡Es como una fiesta de sabores que te envuelven y te hacen querer volver, incluso si no lo planeabas!

Ahora, no todo fue perfecto. Recuerdo una experiencia algo desafortunada donde, a pesar de que la comida estaba buena, la falta de información en el menú me causó un problema. Pedí un steak tartar y, aunque estaba delicioso, me encontré con que contenía anchoas. Como soy intolerante al pescado, aprendí de la forma más dura que hay que estar siempre atento a los ingredientes. Así que, definitivamente, les recomendaría que pongan más atención a los alérgenos en el menú. En estos tiempos, ¡no subestimen a nadie!

Y acerca de las reservas, yo diría que es una buena idea hacer una o planear con tiempo, especialmente si piensas en probar su famoso menú degustación. Aunque tuvimos que esperar un poquito cuando llegamos, y la terraza es una opción muy agradable, es mejor prevenir que curar. Así que asegúrate de llamar antes de aparecer, porque el Mesón Licinia definitivamente se está ganando su reputación y es probable que esté bastante lleno. ¡No querrás perderte esta experiencia!

Cuál es el número de teléfono para hacer reservas en el Mesón Licinia

Y, hablando del Mesón Licinia, no sé cómo no habíamos probado su menú degustación de 26€ antes. De verdad, fue una experiencia genial. Desde el momento en que llegamos, nos atendieron con una sonrisa. Los camareros son súper amables y atentos, siempre dispuestos a recomendarte lo mejor de la carta. ¡Deberías probar las migas y el carpaccio de Angus! La presentación de los platos es impecable y no se quedan cortos en las porciones, justo lo que necesitas para salir de allí satisfecho pero sin explotar.

Ahora, no todo ha sido perfecto. Recuerdo que una vez tuvimos que esperar un poco más de lo que nos hubiera gustado. Media hora para que nos trajeran algunas raciones de jamón y croquetas. Pero, sinceramente, valió la pena, porque justo al dar el primer bocado a la hamburguesa Angus ya se nos olvidó la espera. ¡Y qué decir de los postres! Estaban de muerte. La calidad de la comida en general es de cinco estrellas, así que nos quedamos con ganas de más.

Además, si te gusta disfrutar de tu comida al aire libre, la terraza es una joya. Es perfecta para relajarse mientras tomas algo. La caballa es todo un acierto y resulta sorprendente cómo algo tan sencillo puede estar tan bien hecho. Es un lugar donde parece que cada detalle cuenta, y eso se agradece.

En fin, ya sabes, si tienes que estar en Morata de Tajuña, ¡no puedes dejar de ir! La cocina tradicional de Jose Ramón es un must, y Anna en la sala te hará sentir como en casa. Por último, si te preguntas el número de teléfono para hacer reservas, es conveniente tenerlo a mano: puedes llamar al 918 88 20 17. ¡No te quedes sin mesa!

Qué tipo de comida se ofrece en Mesón Licinia

Y si hablamos del Mesón Licinia en Morata de Tajuña, no hay duda de que es un lugar que se lleva esas 5 estrellas. La atención es excelente y la calidad de la comida mediterránea realmente se siente. La terraza es un verdadero encanto, sobre todo ahora que estamos en un clima donde se puede disfrutar al aire libre, ¡y además respetan las distancias entre mesas! Para los que andan en coche, el párking gratuito es un plus que no todos los sitios ofrecen, así que ya tienes una razón más para visitarles.

Claro que no todo es perfecto. Escuché de algún amigo que probó un menú degustación que estaba rico, pero que se hicieron esperar un poco entre plato y plato. Sabes cómo es eso, a veces las ganas de comer superan al tiempo de espera, aunque, por lo que dicen, la experiencia general fue positiva. Sin embargo, hay quienes han tenido experiencias menos agradables, que parece que el servicio no siempre está a la altura y que el tiempo de espera puede resultar frustrante.

En cuanto a comida, en el Mesón Licinia se puede disfrutar de un menú que mezcla sabores tradicionales y originales, como las migas, la ensalada templada de picaña, los boquerones con tomate seco, y el cochinillo a la miel que siempre es un éxito. A algunos también les gustó su arroz negro, aunque hay opiniones mixtas sobre la calidad de las raciones y la elaboración de ciertos platos. Y por supuesto, para los que tienen alguna intolerancia, se han tomado la molestia de ofrecer opciones adecuadas sin que se sientan excluidos, que eso siempre se agradece.

Así que, si te apetece un restaurante donde disfrutar de una buena comida en un ambiente agradable, el Mesón Licinia parece ser una buena opción, aunque con un poco de paciencia. Perfecto para una comida con amigos o una velada tranquila. ¿Te animas a probarlo?

Quién elabora los platos en Mesón Licinia

Y hablando de Morata, el Mesón Licinia fue una elección increíble. Desde el primer bocado, sabías que habían hecho bien las cosas. ¿Te acuerdas de las croquetas de jamón? ¡Estaban buenísimas! Perfectas para empezar, y lo mejor es que tenían un aire original que te hacía querer probar más. La presentación de cada plato fue simplemente espectacular; notabas que cuidaban cada detalle. Y no solo la comida, ¡el servicio fue de 10! Siempre atentos y con una sonrisa, lo que realmente hace la diferencia.

Lo chido es que no es solo un lugar para comer. La atmósfera era tan agradable, especialmente en el comedor interior con la chimenea, que daba ganas de quedarte allí todo el rato. Esa combinación de cocina tradicional con toques de vanguardia es simplemente genial. Y los postres, que se me olvidó sacar fotos, eran también muy originales y atractivos. Por cierto, el gin tonic estaba hecho a la perfección, un gran plus después de una larga ruta.

Si buscas un sitio donde disfrutar con amigos o una cena especial, definitivamente este es el lugar. Cada plato ronda los 5 euros, así que la relación calidad-precio es excelente. No hablemos de los torreznos, que tenían una textura compleja y sabían a gloria. Ya te digo, todo en un ambiente sereno, con una terraza bonita, perfecta para relajarse después de un día explorando.

Y claro, ¿quién se encarga de todo este espectáculo culinario? En mesón Licinia, el chef Juan Carlos y su equipo se encargan de cada plato, imprimiendo su pasión y conocimiento en cada bocado. Un verdadero amante de la gastronomía que sabe exactamente cómo crear experiencias inolvidables. ¡Ya estoy contando los días para volver!

Hay opciones de postre disponibles en Mesón Licinia

Y hablando de Mesón Licinia, qué buen sitio para disfrutar de una comida en las afueras de Madrid. He estado allí hace más de 10 años y la verdad es que sigue siendo un lugar espectacular. El entorno es super agradable, perfecto para una comida en buena compañía. La última vez que fui, lo disfruté tanto que repetí la visita en menos de un mes. El servicio es de 10, los camareros son super amables y atentos, ¡no se hacen de rogar para nada!

Ahora, no todo fue perfecto, claro. Por lo que he escuchado de algunos amigos, no siempre están bien preparados, y he oído comentarios sobre que a veces a las 3 ya no hay muchas opciones en el menú. Por ejemplo, si te da por ir a probar los cogollos de merluza y ya no están, te quedas con lo que queda; que puede ser cazón rebozado o caballa, que no es exactamente lo que esperabas. Aún así, a mí me ha ido genial en mis visitas, así que tal vez sea cuestión de suerte o del día en el que vayas.

Lo que sí puedo asegurar es que el ambiente es genial, siempre lo he encontrado limpio y acogedor. En cuanto a la comida, ¡vaya calidad! Si no sabes qué pedir, te recomendaría el arroz con bogavante, está de muerte. Además, te cambiaron los cubiertos y platos con cada plato, lo que me pareció un buen detalle. Aunque, si tengo que ponerle un pero, era un pelín fresquito en el salón, pero fácil de solucionar con una chaqueta.

Y bueno, hablemos de postres porque sí, hay opciones bastante interesantes en Mesón Licinia. La tarta Napoleón fue la estrella de la mesa la última vez, estaba *espectacular*. No tengo dudas de que tienes un par de opciones para endulzar la comida, así que si tienes antojo de algo dulce, ¡no dudes en preguntar!

Fotografías Mesón Licinia